Desde muy pequeña, Josefina Jarama sueña
con una vida mejor y sabe que para llegar hasta ella solo hay una vía, cruda y
pragmática: el ascenso social. Este Lazarillo moderno comienza su andadura en
una fábrica de juguetes en Ibi, Alicante. Allí es la protegida del jefe y
además trabaja junto a su madre, una comunista militante que opera en la
clandestinidad y que deberá huir para que no la encarcelen. La protagonista ha
de elegir entonces entre su madre o sus sueños en la fábrica, y elige.
Con Josefina y su peripecia, el lector
recorre varias décadas de nuestra historia reciente, diversos puntos calientes
del «milagro español» y, sobre todo, varias vidas. Animosa, descacharrante y
única, Josefina hace realidad un sueño que no se ha propuesto: llegar al
corazón.
El libro de hoy es un libro que narra la vida de la protagonista desde un punto de vista cómico aunque, desde jovencita, la realidad es que ha tenido una vida bastante complicada y llena de infortunios.
Según narra el autor la adolescencia y posterior paso a la edad adulta de Josefina, todo hace presagiar que la pobre va a tener una vida un poco complicada y acompañada siempre de bastante mala suerte.
Si soy sincera, he de decir que esta novela no ha conseguido entusiasmarme en ningún punto de la lectura. Quizá este género no es de los míos, porque normalmente las novelas que narran las desgracias ajenas con un punto de sátira y rozando la absurdez nunca han conseguido agradarme, al contrario, en este caso me ha llegado a aburrir.
Se trata de un libro muy cortito pero que a mi personalmente se me ha hecho algo largo y difícil de leer.
Algo que no me gusta nada y que implica que un libro se me haga pesadísimo son los capítulos largos y en este caso son "interminables". El libro se divide únicamente en cuatro capítulos o partes muy extensas donde se describe cada etapa de la vida de la protagonista.
Tras leer esta historia sigo buscando el propósito de la novela, puesto que no he conseguido encontrarlo, siento que me he quedado igual que al empezar a leerla. Todo el libro es algo monótono y que no lleva a ningún final.
Supongo que las personas acostumbradas a leer este tipo de novelas si que le hayan encontrado el sentido a la historia, de ahí las buenas críticas que he podido leer sobre este libro.
