SINOPSIS
La
vida bajo el régimen del apartheid ha creado un futuro cómodo para Robin
Conrad, una niña blanca de nueve años que vive con sus padres en el
Johannesburgo de los años setenta. En el mismo país, pero a mundos de
distancia, Beauty Mbali, una mujer de etnia xhosa que vive en una aldea rural
de una reserva bantú del Transkei, lucha por sacar adelante a sus hijos ella
sola tras la muerte de su esposo. Ambas vidas se han construido sobre la
división entre razas, y no estaban destinadas a cruzarse…
Hasta que estalla la
revuelta de Soweto y una protesta de estudiantes negros prende la mecha del
conflicto racial, alterando los cimientos sobre los que se erige su sociedad.
Esto sacude sus mundos, provocando la muerte de los padres de Robin y la
desaparición de la hija de Beauty.
De
este libro me enamoró a simple vista la portada, me pareció muy tierna y llena
de amor desde el principio. Luego leí la sinopsis y confirmó que la historia
podría encantarme tanto como lo había hecho la portada.
Una
vez que empecé a leerlo sabía que iba a ser una historia llena de sentimiento,
aunque he de reconocer que me sorprendió la dureza de algunos momentos.
El libro comienza narrando dos historias paralelas que parece que nada tienen que ver la una con la otra, a cada cual con una trama más intensa, hasta que finalmente un nexo las pone en común y la historia aún se vuelve más interesante.
Por un lado está Robin, una niña de familia adinerada, cuyos padres son asesinados a sangre fría por hombres negros y que después del trágico suceso tiene que irse a vivir con su tía Edith, una mujer a la que le cuesta sentar la cabeza y por fin formar una familia.
La otra protagonista es Beauty Mbali, una mujer negra, que tras perder a su marido debe salir adelante cuidando de sus hijos, hasta que su hija mayor desaparece tras una revuelta y decide dejar todo para acudir en su búsqueda.
Como ya he comentado antes, se trata de una historia que pone el alma en vilo desde el principio prácticamente, llena de situaciones al límite y que a lo largo de toda la historia va mostrando lecciones de vida de las que marcan.
En definitiva, esta novela no me ha dejado para nada indiferente, y me ha enseñado que por muy complicadas que se pongan las cosas hay que ser tenaz y perseguir continuamente lo que queremos conseguir.
